miércoles, 2 de noviembre de 2016

La fórmula de la canalización de emociones: SAS+Inside Out+Papuchi+YODA



Otra bonita experiencia con el SAS. 


Es curioso cómo la búsqueda de una segunda opinión médica tras mi nefasta experiencia en Puerta del Mar se convirtió, desde un principio, en un calvario de derivaciones absurdas y burocracia obstaculizadora, hasta que tras mucho insistir, pudimos conseguirlo al fin, casi dos años después. 


Y todo ese esfuerzo para, desde entonces, encontrarnos con unos grandes profesionales más preocupados inicialmente en exculpar posibles errores o probables malas praxis de compañeros que en estudiar el caso. Un absurdo corporativismo algo llamativo a mi entender porque no creo que sea ni el lugar ni las personas apropiadas para ello, puesto que llegado el caso serán otras instancias las que lo determinen.


Permitidme la insistencia, pero la nueva ración de "corporativismo" que vivimos ayer, volvió  a ser por sí sola esperpéntica, dentro de un proceso que ya roza lo macabro. Bueno, para no caer en lo que el hace años entrenador culé, Louis Van Gaal denunciaba como "SIEMPRE NEGATIFA, NUNCA POSITIFO", al menos en esta ocasión, aunque tras escuchar diversas frases absurdas, hemos conseguido que casi dos años después nos manden nuevas pruebas. Eso sí, para no romper con la magia del momento, el señor doctor tras, en primer lugar, tener que llevarme a la camilla de su consulta ayudado por mi mujer y un amigo que siempre nos acompaña; y en segundo, cerciorarse que no puedo levantar sin gritar de dolor mi pierna izquierda más de 30 grados, me manda una radiografía en la que tengo que doblar la espalda yo sólo y sin ayudas, hacia delante y después hacia atrás. 😳😳😳😳 Imaginad la cara de la pobre radióloga cuando comprueba mi situación y a pesar de ello en mi intento por complacer a sus excelencias los doctores, dicho intento se transforma en dolor, el dolor en grito y el grito en nauseas... Os ahorro la descripción del número...😱😱😱...lo ocurrido allí a continuación no merece mayor comentario 💩💩💩💩


Lo que sí me gustaría destacar es el proceso que vivimos mi familia y yo, cual día de la marmota, cada vez que nos enfrentamos a situaciones similares y desgraciadamente ya convertidas en cotidianas debido a tantos frentes abiertos desde 2014: "despido improcedente trabajo, reclamación de mensualidades a deber, valoraciones absurdas de  minusvália e incapacidad, tres intervenciones en columna, enfermedades y muerte familiares próximos, juicios, otras demandas posteriores, etc,etc... 


Por todo ello, pusimos en marcha una vivencia emocional familiar que me gustaría explicaros puesto que puede suponer el gran descubrimiento de la psicología en el nuevo milenio. Creedme, no exagero. La fórmula incluye las siguientes variables. 


Aprender a canalizar emociones=SAS+INSIDE OUT+Yoda+Papuchi.


Si usted es andaluz, tiene todas esas variables a mano, pero si no lo es y sólo es español o pobre, no se preocupe: El SAS puede ser sustituido por cualquier servicio sanitario público de los últimos años.


Ahora expliquemos la fórmula:


1. SAS e INSIDE OUT.


Primero el MIEDO me embarga conforme el evento con el SAS se acerca. 

Una vez sucedido el encuentro, siento IRA, rabia ante la estupidez y la soberbia. 

Una ira que, gracias a que en este país está prohibido comprar armas, entonces canalizo normalmente en llanto y TRISTEZA. 

Ahora mismo, mientras os escribo he pasado al enfado (ASCO).

Y espero al acabar de escribir que en el ciclo vuelva  a aparecer la ALEGRIA. 


2. YODA, el maestro Jedi.


En definitiva, nuestra montaña rusa de emociones a las que todos nos enfrentamos, pero que SI NO APRENDES el camino a seguir corres el riesgo de que la oscuridad rodee toda tu vida. Como decía el maestro YODA (STAR WARS, The empire strikes back-1980, marca registrada por LUCASFILM & DISNEY.Todos los derechos reservados): "Que no te invada el odio. Eso lleva al lado oscuro.,(...) El miedo es el camino hacia el Lado Oscuro, el miedo lleva a la ira, la ira lleva al odio, el odio lleva al sufrimiento". 


Por suerte para mí, la canalización de las emociones negativas la he aprendido gracias a mi familia, a unos buenos psicólogos@s y a muchos de vosotros, mis amigos. Todos hacéis que tenga ganas de seguir jugando el partido, contando con un equipo tan maravilloso.



PD: A los que en estos años nos enviáis emociones tóxicas porque sois tan desgraciados (no dicho en término peyorativo, sino calificativo) que no sabéis canalizar vuestras frustraciones, os aviso: 


NO TENÉIS NI PUTA IDEA DEL EQUIPAZO QUE TENGO. Seguimos PARTIDO A PARTIDO y nos levantaremos las veces que hagan falta. 


3. Papuchi.


Ah! y si no lo creéis, preguntad a más de un calvo que andan por ahí sueltos, algunos de ellos de calvicie completa y otros con tres o cuatro pelos que intentan cubrir sin éxito desde que siendo jovenzuelo imitaba a Julio Iglesias. Y he aquí el último y decisivo componente de la ecuación. Julio Iglesias, al que no puedo nombrar sin rogar a Dios guarde en la gloria a su señor padre, el insigne doctor Julio Iglesias Puga, el cual sí era un maestro para "canalizar emociones" y mandar a freír gárgaras a los mediocres...😘😘😘😘